Por Paris Permenter y John Bigley
Viajar con mascotas de forma segura es una gran preocupación para todos los propietarios de mascotas del mundo. Para ellos, sus amigos peludos son un miembro más de la familia, y por tanto, es fundamental poder ir de vacaciones con ellos y con total tranquilidad.
A pesar de que cada vez es más frecuente viajar con perro, o viajar con mascotas en general, podemos observar que aún queda un largo camino por andar en cuanto a lo que seguridad se refiere. Un estudio sobre viajar con perro seguro, realizado por Kurgo y AAA, ha demostrado que, si bien casi seis personas de cada diez han viajado con su perro en coche al menos una vez al mes durante el último año, sólo un 16% ha atado al perro dentro del vehículo.
A la hora de viajar con mascotas, distintas regiones empiezan a regular el transporte de las mascotas en el coche pero no hace falta legislación para que un conductor prudente entienda que atar su perro es preferible para él y para los que viajan con él. Un perro sin atar, de unos cinco kilos, que va en un coche a tan sólo 50 kilómetros por hora ejercerá una presión de unos 136 kilos en caso de colisión.
Organiza tu próximo intercambio10 medidas de seguridad a tener en cuenta para viajar con mascotas
Aquí te dejamos una lista de 10 medidas que puedes tomar viajar con mascotas de forma segura:
1. Habla con tu veterinario sobre viajar con tus mascotas
La primera medida es hablar con tu veterinario del viaje y de las necesidades específicas de tu mascota. Si viajas fuera del país (o vuelas a alguna ciudad intracomunitaria), necesitarás un pasaporte veterinario (dentro de la UE). Es fundamental que tu veterinario te informe de todo a la hora de viajar con mascotas.
2. Ponle un microchip a tus mascotas
Es obligatorio que tu perro o tu gato lleve microchip, recuérdalo. Y esto es muy útil en un viaje, ya que en caso de pérdida puede ayudar a su identificación y contacto contigo en caso de pérdida.
3. Prefiere el coche al avión si tienes una mascota de gran tamaño
A no ser que tu mascota sea bastante pequeña para poder viajar en la cabina del avión contigo, elige el coche, siempre que sea posible. Volar en la bodega del avión con las maletas no es nada agradable para los animales y puede hacer que viajar con mascotas se convierta en una experiencia muy desagradable.
4. Ata a tu mascota.
Tanto si decides atar a tu perro porque es grande o, si es pequeño, sentarlo en un asiento específico para poder atarlo, o por último meter a perritos y gatos en una transportín (que a su vez irá atada de forma segura), asegúrate de que vaya bien sujeto en el coche. Además de protegerle si ocurre un accidente, se evita también que distraiga al conductor. El estudio de Kurgo y AAA ha demostrado que casi un tercio de los conductores se han dejado distraer cuando el perro se ha puesto de pie en el compartimento central o ha saltado al asiento delantero.
5. Por favor, la cabeza dentro.
Desde luego, a todos nos encanta ver fotos en las que el perro saca la cabeza por la ventana del coche pero se corre el riesgo de que salte fuera del vehículo, reciba un golpe con un objeto que pasa rozando la carrocería o se le metan en los ojos pequeñas basuras que van volando. Abre un poco la ventanilla para que entren el aire y los olores del exterior pero no dejes que tu perro saque la cabeza.
6. Comprueba que tu mascota lleva siempre su etiqueta de identificación.
Al viajar con mascotas, éstas se pueden escapar fácilmente al llegar a un sitio nuevo. Por lo tanto, verifica que lleva una etiqueta de identificación, claramente legible, con tu nombre (que es más importante que el suyo) y tu teléfono. Si vas a quedarte cierto tiempo en el mismo lugar, prepara una segunda etiqueta con tu dirección temporal. Muchos viajeros recurren a la alta tecnología y les ponen una etiqueta GPS que les permite localizarles con su teléfono.
7. No dejes nunca al perro solo en el coche.
Si piensas viajar con tu perro, planifica tu viaje con antelación de forma que el perro te pueda acompañar en tus paradas. La temperatura en los coches puede alcanzar niveles muy altos en pocos minutos, aunque no sea verano, y además te lo pueden robar si lo dejas solo.
8. Prepárate a lo imprevisible.
Te llevará sólo unos minutos hacer una lista de emergencias veterinarias que puedan ocurrir durante el viaje o en el destino. Un botiquín compacto de primeros auxilios te será muy útil para los percances menores durante el camino.
9. Comprueba una y otra vez antes de abrir el transportín.
Al viajar con tu gato, cuando llegues a la casa de intercambio, comprueba la habitación, dos veces mejor que una, para asegurarte de que no hay nada peligroso para tu gato ni tampoco lugares inalcanzables en los que quiera esconderse. Quizás tu gato tienda a esconderse hasta que consiga tranquilizarse.
10. Baja con calma del coche.
Al llegar, no salgas del coche mientras tu mascota no esté tranquila y calmada. Ponle la correa a tu perro antes de salir. Toma algunas precauciones antes de sacar a tu gato del transportín. Empieza por llevarle a un baño o a una habitación pequeña al llegar, pero primero comprueba si hay huecos en los que pueda esconderse (¡seguro que tu gato los buscará!).
Estos momentos dedicados a la planificación del viaje con tu mascota te ayudarán, así como a tu perro o gato, a viajar más tranquilo y seguro, conservando sólo buenos recuerdos para los años venideros.
El intercambio de casas como mejor solución para viajar con mascotas
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