Consejos para comer barato durante las vacaciones

Como bien sabemos, irse de vacaciones puede suponer un importante gasto dentro de la economía familiar por buscar dónde comer sin que se vaya de precio, dónde dormir, qué actividades realizar… etc.
Seguramente lleváis todo el año pensando en las próximas vacaciones y dónde poder ir para evitar gastos innecesarios, pero a la vez disfrutar de un viaje en condiciones.
Uno de los grandes gastos cuando salimos de casa es la comida y encontrar restaurantes baratos donde comer no es tarea fácil. Por eso, en este artículo queremos daros algunos consejos para ahorrar en una de las partes del viaje en la que más dinero te puedes gastar.

Recomendaciones para comer barato durante el trayecto

Ya sea un viaje por carretera, en avión o en tren, seguramente durante el trayecto por muy largo o corto que sea, necesites parar y reponer fuerzas para continuar. Esto se traduce en comer algo con lo que paliar un poco el hambre o los nervios por la inminente llegada.

Los restaurantes de los trenes o de carretera suelen ser bastante elevados de precio por lo que una de nuestras primeras recomendaciones es que, en la medida de lo posible, lleves tu propio snack para el camino.

Puedes comprarlo antes de salir de tu destino o prepararlo en casa. Con ello podrás evitar este gasto que suele ser elevado en la mayoría de los casos.

Dónde comer una vez lleguemos al destino

Una vez hayamos llegado al destino, seguro que encontraremos numerosas opciones para comer y, aunque parezca mentira, también podremos encontrar lugares donde comer barato. ¡Sólo hay que saber dónde buscar!

Algunas de las ideas que os proponemos para ahorrar en comida viajando son:

• Salir de los lugares de interés turístico

Sabemos que es un tópico, pero es la realidad. Lo más probable es que durante las vacaciones te pases el día visitando los puntos turísticos de tu destino, pero eso no quiere decir que no te puedas perder por algún barrio colindante.

Cuando estés cerca la hora de comer, te recomendamos que te pierdas por diferentes calles y barrios cercanos a donde te encuentres. Verás que según vayas adentrándote en los barrios de los lugareños, los precios irán reduciéndose y, además, encontrarás comida típica del lugar.
Siempre puedes preguntar a alguna persona local dónde comer de forma barata y rica. ¡Estarán encantados de mostrarte su sitio preferido!

Es una gran oportunidad además de comer barato, por el hecho de conocer más a fondo la cultura de ese destino y a la gente en su día a día.
¡Un descubrimiento que te hará entender mejor a la gente y su gastronomía!

• Comidas rápidas en cualquier lugar

Sabemos que no siempre apetece buscar dónde comer o comer en restaurantes todos los días. Si ese es tu caso y prefieres comer algo rápido para seguir visitando lugares sin perder tanto tiempo, tienes dos opciones:

• La primera es ir a cualquier cadena de comida rápida que todos conocemos. Un día es un día, siempre puedes ir a estos locales económicos y probar la comida local en otra ocasión o por la noche.
• Otra opción, es buscar algún puesto callejero o local en el que tengan comidas para llevar. Esta alternativa te dará la oportunidad de hacer una comida rápida y de forma sencilla y te la podrás comer en cualquier punto de la ciudad.

¿Quién dijo que hay que pagar grandes cantidades para comer en frente de la Torre Eiffel, el Big Ben… etc? Puedes optar por ir a estos establecimientos y elegir las vistas que prefieras.
¡Un lujo a precio reducido!

• Hacerte tu propia comida

El hecho de viajar no quiere decir que debas alojarte en un hotel en el que necesariamente todas las comidas deban ser fuera del alojamiento.
Si quieres ahorrar tanto en alojamiento como en comida, una gran opción es ir a un apartamento en el que te sientas como en casa y puedas seguir tu rutina diaria de comidas mientras estás fuera.

Con HomeExchange tienes esta oportunidad, puedes comer barato gracias a la opción de poder cocinar en el apartamento en el que te alojes. Visitas los puntos de interés que tengas planeados… y a la hora de comer volver a la tranquilidad de un hogar.
De esta manera, evitas buscar donde comer en restaurantes baratos todos los días. Simplemente puedes ir a hacer la compra y comer tranquilamente en tu casa para seguir tu viaje por la tarde.

• Mercados locales

Antes de viajar siempre es bueno informarse sobre el destino y en concreto, sobre las fechas en las que estarás allí. En muchas ocasiones hay mercados locales que se ponen todas las semanas o en festividades especiales que son una fantástica opción para comer barato.

Además, hacer uso de estos mercados puede ser una gran alternativa para comprar agua o tomar un snack a medio día de una forma más económica.
En definitiva, informarse antes de viajar sobre el destino y sus opciones u opiniones en internet de restaurantes baratos, o simplemente buscar una opción de alojamiento que te de la oportunidad de cocinar, son algunas de las claves para viajar de forma más barata sin perder la esencia del turismo.

¡Planifica, descubre y déjate llevar durante las vacaciones!