Nuestros consejos para unas vacaciones sin residuos

¿Estás intentando adoptar un estilo de vida más respetuoso con el medio ambiente? Entonces, no abandones tus buenos hábitos durante las vacaciones. Así podrás compensar, en cierto modo, el impacto negativo que los viajes tienen sobre nuestro planeta. Ten en cuenta que durante las vacaciones se generan muchos residuos: botellas y bolsas de plástico, recuerdos desechables, envases de alimentos, etc.

Sin embargo, con un poco de preparación y la actitud adecuada, podrás disfrutar de tus viajes de manera responsable. En este artículo queremos compartir contigo nuestros mejores consejos para viajar sin (apenas) generar residuos.

¿Conoces el movimiento “Zero Waste”?

El movimiento “zero waste” o “residuo cero” es un estilo de vida y una filosofía que promueve un consumo responsable y la reutilización de los recursos para minimizar el impacto ambiental. Por supuesto, el objetivo no es alcanzar la perfección generando literalmente cero residuos (algo imposible), sino comprometerse a adoptar una serie de hábitos progresivos que nos permitan minimizar la cantidad de residuos que generamos.

En la práctica, esto se traduce en acciones que todos podemos llevar a cabo, como evitar los artículos de usar y tirar, optar por alternativas reutilizables, reparar en lugar de tirar, comprar a granel, compostar los residuos orgánicos, etc. La suma de estos pequeños gestos cotidianos puede crear un impacto realmente positivo en el medio ambiente.

Las 5 R: principios básicos para reducir los residuos

Para ayudarte a conseguirlo, puedes seguir esta útil regla conocida como “las 5 R”:

1.Rechaza lo que no necesitas (folletos, pajitas, productos desechables gratuitos, etc.).
2.Reduce tu consumo, compra solo lo que realmente necesites.
3. Reutiliza en lugar de comprar cosas nuevas.. Da una segunda vida a los objetos en lugar de desecharlos, encontrando nuevos usos para productos o materiales.
4. Repara tus electrodomésticos, tu calzado, tu ropa, etc. si es posible darles una segunda oportunidad.
5. Recicla de acuerdo con las normas locales aquello que no puedas reutilizar o evitar comprar.

El orden de las 5 R es importante: primero rechaza, reduce y reutiliza, y recicla solo cuando no haya otras opciones.

El movimiento zero waste o residuo cero se basa en un sencillo principio:
consume menos, pero mejor. Esto se aplica tanto a nuestros hábitos diarios como a las decisiones relacionadas con las compras, la ropa, la cocina y los viajes.

¿Por qué es importante viajar sin generar residuos?

¿Y si las vacaciones fueran la oportunidad perfecta para adoptar buenos hábitos o comprometerte más con el movimiento zero waste?

Al reducir tus residuos estarás contribuyendo a reducir la huella de carbono asociada a tus viajes. Este gesto es además una manera de mostrar respeto por los lugares que visitas, ya que ayudas a conservar sus recursos naturales.

Además de ayudar al planeta, viajar sin generar residuos también tiene ventajas para ti: un estilo de vida minimalista aligera tu equipaje y facilita tus viajes. También te ayuda a ahorrar, ya que elegir artículos reutilizables o de segunda mano suele ser más económico que comprarlos nuevos.

1. Prepara un kit de viaje “zero waste”

Cambiar nuestros hábitos y la manera en que viajamos es fundamental. Unas vacaciones sin residuos comienzan por una buena preparación y organización. No es complicado, no te preocupes.

Antes de salir de viaje, prepara un kit “zero waste”. Estos son algunos de los imprescindibles que debe incluir:

• Botella de agua de acero inoxidable: indispensable para evitar las botellas de plástico. Si viajas a lugares donde el agua del grifo no es segura (o si haces mucho senderismo), incluye unas pastillas potabilizadoras en tu kit.
• Recipiente hermético (como un táper o una fiambrera) para ir de picnic o llevarte las sobras de los restaurantes.
• Cubertería reutilizable de bambú o acero inoxidable para todas tus comidas al aire libre (incluida una pajita si sueles utilizarlas).
• Bolsas de tela para hacer la compra, para los recuerdos y para la ropa sucia.
• Bolsas reutilizables para la compra de frutas y verduras o de productos a granel.
• Paños de cocina y servilletas de tela para evitar el uso de las servilletas de papel y del papel de cocina.
• Envoltorios de cera de abeja para sustituir el film transparente y el papel de aluminio.

2. Pásate a los cosméticos y productos de higiene sólidos

Nuestros baños suelen estar llenos de botellas de plástico de todo tipo. Los cosméticos convencionales, además de generar una gran cantidad de plástico, también suelen contaminar el agua. Pero la buena noticia es que la cosmética sólida está de moda y cada vez hay más opciones disponibles.

Además de ser respetuosos con el medio ambiente y de no llevar químicos ni conservantes, ¡los cosméticos sólidos ocupan menos espacio en tu neceser! Para tus próximas vacaciones, piensa en llevar:

• Jabón y champú sólidos
• Pasta de dientes sólida o en polvo
• Un cepillo de dientes de bambú
• Desodorante natural en bote de cristal
• Discos de algodón reutilizables o toallitas de microfibra para desmaquillarse.
• Protector solar sólido

3. Come productos locales y evita el desperdicio de alimentos

Al igual que en tu día a día, algunos hábitos pueden marcar una gran diferencia. Por ejemplo:

• Elige productos locales y de temporada, que suelen estar disponibles en los mercados o en las tiendecitas del barrio. Y no es solo por proteger el medio ambiente, sino porque es una oportunidad fantástica para descubrir nuevos sabores y conocer mejor tu destino.
• Cuando salgas a pasear, evita los tentempiés envasados de forma individual y opta por alimentos a granel o comida preparada por ti.
• En los restaurantes, pide las sobras para llevar y evita que las tiren. ¡Y mucho mejor si llevas tu propio recipiente! En algunos países, es habitual que los restaurantes te ofrezcan llevarte las sobras a casa. En otros puede parecer extraño, pero no dudes en explicar con educación que quieres evitar el desperdicio de alimentos.
• Si haces un intercambio de casa, intenta cocinar con ingredientes frescos y sin empaquetar siempre que puedas.

4. Gestiona tus residuos de forma inteligente

Cuando viajes, intenta generar la menor cantidad posible de residuos adoptando estos buenos hábitos:

• Rechaza educadamente y evita en la medida de lo posible los productos de un solo uso, como bolsas, recuerdos de plástico, pajitas, folletos o los artículos de aseo en miniatura que suele haber en los hoteles. Si todos adoptamos estos pequeños hábitos, podemos generar un impacto real.
• Separa tus residuos también en vacaciones. Pero asegúrate de seguir las normas del lugar.
• ¿Fumas? ¡No te olvides de llevar un cenicero de bolsillo!

5. Compra recuerdos útiles y duraderos

Todos nos sentimos tentados de llevar algún recuerdo, ya sea para recordar un lugar que nos ha emocionado o para regalar a nuestros seres queridos. Pero es mejor evitar los pequeños objetos que acabarán olvidados en un cajón. Mejor opta por lo siguiente:

• Artesanía local: ropa, decoración, arte, joyería. etc.
• Algún producto gourmet que no lleve demasiado embalaje. ¡La manera perfecta de compartir las especialidades locales!
• Una foto impresa o un diario de viaje personalizado.

Este tipo de regalos serán más valiosos para tus seres queridos y, además, estarás contribuyendo a la economía local.

6. Elige un alojamiento respetuoso con el medio ambiente

No todos los alojamientos son iguales en lo que respecta a las prácticas ecológicas. Cuando eliges un intercambio de casas con HomeExchange, estás optando por un alojamiento que te permite mantener tus hábitos cotidianos para generar menos residuos.

Al tratarse de casas realmente habitadas, cuentan con todo el equipamiento necesario para la vida cotidiana. Puedes utilizar todos los recipientes disponibles y cocinar productos locales y de temporada para tus comidas, aperitivos y picnics.

Además, en HomeExchange nos encanta compartir. No dudes en pedir consejo a tus anfitriones, por ejemplo, sobre mercados locales y tiendas a granel.

Conclusión: viajar diferente es sinónimo de viajar mejor

Ten en cuenta que no existe la maleta perfecta para viajar sin generar residuos. Como ocurre con todo lo ecológico, el objetivo no es la perfección (que puede hacer que te desanimes y lo dejes), sino hacer lo mejor que puedas de manera consciente con los medios que tengas a tu disposición.

Y si tus pequeños actos te parecen insignificantes en comparación con la complejidad de los desafíos medioambientales, recuerda que el cambio se produce de manera colectiva, sobre todo cuando millones de personas se van de vacaciones. Como decía Eduardo Galeano, “Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo”.

Así que, este verano (¡o invierno!), intenta poner en práctica algunos de estos consejos. Verás que no es tan difícil hacerlo y que te permitirán viajar de manera más auténtica y gastando menos.