Artículo por Hollee Thornton

El intercambio de casas me hace disfrutar de unas ventajas que con otro tipo de alojamiento sería impensable. Todo el mundo sabe que ahorrar en el alojamiento es un factor motivador del intercambio de casas. Sin embargo, hay muchas otras ventajas que me han convencido de que el intercambio de casas es la manera más agradable de viajar en familia. Y la mayoría de ellas, no se pueden comprar con dinero.

¿Cuáles son las ventajas que más me gustan del intercambio de casas?

1. Bicicletas

Se pueden alquilar bicicletas en la mayoría de grandes ciudades, pero puede ser algo costoso para tu presupuesto de vacaciones. Yo siempre pregunto a mis partners de intercambio sobre la posibilidad de intercambiar bicicletas y scooters a la hora de organizar un intercambio. En Amsterdam, ésto nos permitió explorar el campo y los encantadores pueblecitos en las bicicletas que nos dejaron nuestros anfitriones. Gracias al hecho de haber encontrado una familia con hijos de edades similares a los míos, las bicis eran además de tamaños similares. Explorar una zona a pie y en bicicleta es la mejor forma de “frenar” un poco y ver los detalles tranquilamente. ¡Una de las mejores ventajas del intercambio de casas!

2. Clases de cocina

Durante nuestro intercambio en Milán, intercambiamos emails con nuestros anfitriones y cuando mencioné que había quedado impresionada por las enormes y preciosas alcachofas del mercado local, y que me encantaría cocinarlas, ellos me ofrecieron una clase de cocina gratis, incluyendo una receta casera que había pasado de generación en generación. La noche antes de irnos, compartimos una tarde maravillosa cocinando, cenando y conversando todos juntos.

3. Probar mascotas

¿Probar? Sí, “probar mascotas” es nuestro código para hablar de “cuidar de mascotas”. Esta ventaja nos ha ahorrado tal cantidad de dinero y frustración, que ni siquiera puedo llegar a imaginar. Durante muchos años, mis hijos me suplicaron tener una mascota, pero nos mudamos al otro lado del mundo (de Estados Unidos a Suiza) y viajar a menudo no es lo mejor para cuidar mascotas. Hemos considerado alguna vez tener una mascota pequeña y fácil, como un conejillo de indias, así que cuando nos ofrecieron un intercambio en París que incluía cuidar de dos conejillos de indias, aceptamos con mucho gusto. A los niños les encantó jugar con los animales pero se dieron cuenta de que cuidar de una mascota era mucho más trabajo de lo que habían pensado. Tener una mascota durante las vacaciones nos proporcionó la incalculable experiencia de entender lo que significa cuidar una mascota cada día.

4. Información en un idioma que entendemos

En todos los lugares donde hemos hecho intercambio de casas, nuestros anfitriones nos han dado información local que no habríamos podido encontrar por nuestra cuenta, como por ejemplo: cómo comprar los billetes de transporte en los estancos de Milán, visitar una granja de animales-bebés en Amsterdam, y la cantidad de actuaciones en las calles cercanas al Pompidou de París, que siempre son tan entretenidas. Incluso si las hubiéramos sabido encontrar, tener que lidiar con las traducciones de cada página a menudo limita las actividades en las que participarás durante tus vacaciones. Afortunadamente para nosotros, nuestros anfitriones nos lo han puesto siempre muy fácil para preguntarles ideas y aprender más sobre las especialidades de sus países.

5. Juguetes para los niños

Cuando buscamos un intercambio de casas, intentamos encontrar familias que tengan hijos de la misma edad e intereses parecidos a los nuestros. Cuando intercambiamos con familias, siempre es un plus tener juguetes y libros esperándote en tu nueva casa. A nuestros hijos les encanta descubrir juegos y libros distintos a lo que ya conocen y han aprendido a respetar y tener cuidado de las cosas de los demás.

6. Dosis generosas de hospitalidad

Otro plus del intercambio de casas son las bienvenidas tan dulces y las sorpresas de agradecimiento que nos esperan en ambas casas. Habitualmente son especialidades caseras, flores frescas o pequeños tesoros regionales, como detalles de bienvenida o gratificación. A mis hijos les gusta encontrárselos en la nueva casa y también a la vuelta. Éstas son ventajas que no vienen incluidas en las formas típicas de alojamiento.

7. Comida

Los intercambios de casa nos ahorran tiempo y frustración a la hora de comer. Para nuestra familia, disponer de una cocina para preparar el desayuno en cuanto se levanten mis hijos es realmente muy cómodo. También es práctico para lidiar con las restricciones alimentarias y los retos relacionados con comer fuera cada día.

8. La economía colaborativa

Compartir en el consumo colaborativo es una buena manera de sentirme bien, respetando los recursos naturales del planeta. Nos encanta enseñar nuestra tierra a los amigos y a los invitados que nos visitan. Estas experiencias nos ayudan a sentirnos más conectados a la gente de todo el mundo. Aprender a amar y a entender otras culturas nos ayuda a ser mejores ciudadanos del mundo y viajeros más responsables.

9. Autenticidad

Mis intercambios de casa me han llevado siempre a experiencias de viaje más auténticas; experiencias en las que siento que estoy descubriendo lo que es realmente vivir en un nuevo lugar, en vez de las experiencias turísticas hiper-masificadas que vienen con los alojamientos habituales como los hoteles. El intercambio de casas es una forma de viajar auténtica y única.

10. Confianza

Mi actitud hacia la humanidad es que la mayoría de la gente es buena. En un momento en el que el crimen y el miedo han pasado a formar parte habitual de nuestras vidas, el intercambio de casas nos ha dado oportunidades para mejorar nuestra confianza hacia los desconocidos. Es cierto que el riesgo mutuo proporciona un nivel de seguridad, pero al final del día todo se basa en la confianza. Y con cada intercambio positivo, mi fe en la bondad de la humanidad se reafirma. Me hago eco de los comentarios de Emily Kasriel: “La confianza suele desarrollarse a lo largo del tiempo con encuentros que se repiten, pero cuando entras en el intercambio de casas, la confianza es inmediata y bastante intensa – aunque también breve. Lo que es interesante es lafacilidad con la quenos sentimos capaces de confiar en este encuentro mediado digitalmente.“