El intercambio de casas es bueno para todo el mundo, pero además ayuda cada año a que muchas personas que viven fuera puedan volver a su país durante las vacaciones, de una forma más cómoda, económica y local. Tanya es una americana que vive en Oslo desde hace 21 años; hoy comparte con nosotros algunas de las ventajas del intercambio de casas para los “expats” (o expatriados).
1. Volver a casa
Tras 21 años viviendo en Noruega, he vivido muchas veces la verdad en la frase “nunca podrás volver a tu país”. Hasta hace 11 años, cuando utilicé HomeExchange.com por primera vez, para volver a mi California natal. Descubrí así la forma cómo mi familia y yo podíamos volver más a menudo a mi “casa”.
Durante la primera década viviendo fuera todavía pude arreglármelas para alojarme en casa de amigos o familia. Pero a medida que pasaron los años, la gente hizo su vida, mi familia creció y no quería imponer a nadie la necesidad de alojarnos en su casa durante varias semanas. En 2003 ya teníamos tres niños y queríamos pasar unas vacaciones de calidad con los nuestros, sin tener que ser unos invitados ruidosos y pesados.
2. Vivir como la gente local
¡Nuestro primer intercambio no podía haber ido mejor! Encontramos una familia con niños que tenía un montón de juguetes, bicis y cosas para bebés. Nuestros hijos estaban encantados con la habitación de juegos multimedia de nuestros partners de intercambio en California, mientras que los niños que estaban en nuestra casa estaban encantados con las actividades al aire libre que brinda Noruega – como trepar por los árboles, saltar en una cama elástica o nadar en la playa.** También intercambiamos nuestros coches,** y eso nos permitió a ambas familias ahorrar mucho ya que los alquileres en Noruega suelen ser caros y los apartamentos vacacionales de alquiler en Marin County son muy elevados. Las dos familias tuvimos espacio suficiente para invitar a otros miembros de nuestras respectivas familias, y fue un placer poder tener a mi madre y a mi hermana en nuestra casa de intercambio en Tiburon, CA.
3. Una comunidad amable de homeexchangers
**Según mi experiencia, los que intercambian su casa son personas abiertas, dispuestas a ayudar y generosas. **Mi siguiente intercambió me mostró lo amable que puede ser la gente. Mi madre estaba horriblemente enferma y necesitaba ir a Seattle lo antes posible. Escribí mensajes a gente que intercambiaba su casa y vivía cerca del hospital de Seattle, y muy rápidamente me llegó la respuesta de un miembro que me aseguró que podía quedarme en su casa, a pesar de que él no tuviera planes de ir a Noruega. Mi familia y un buen amigo nos quedamos en su casa durante todo el tiempo que mi madre estuvo en el hospital. Tener una casa de verdad fue realmente acogedor. La familia que intercambió su casa vinieron finalmente a Noruega 4 años más tarde.
En dos ocasiones he recibido peticiones de emergencia de miembros que necesitaban ir a Noruega urgentemente, y en ambos casos los he alojado, a pesar de que con uno de ellos ni siquiera hemos ido a su casa. Me encantó poder ayudarlos, sin esperar nada a cambio, y “devolver el favor”. Ahora, necesito volver a Estados Unidos para visitar a amigo cercano que está enfermo, y tanto mi hija como yo podremos quedarnos en una casa de intercambio que hay cerca del hospital. Nuestra vidas se han visto enriquecidas por estas relaciones humanas hechas a través de IntercambioCasas.com, tanto al dar como al recibir.
4. Pasar mi cultura nativa e idioma a mis hijos
Como *expat *siempre ha sido importante para mí llevar a mis hijos a mi país de origen para que despertaran interés por su cultura nativa. En este sentido, intercambiar casa ha sido fundamental ya que mis hijos han podido vivir en una casa de verdad con cosas dentro que también son de verdad. Los hoteles suelen ser siempre muy similares en todas partes, así que alojarnos en un hotel robaría a mis hijos estos puntos de referencia culturales tan importantes. Cuando nos alojamos en casa de otra gente en mi país de origen, mis hijos pueden vivir como si fueran americanos nativos, lo que ha significado mucho para mí. Estas experiencias incluso han ayudado a aplanar el camino para que acabaran pidiendo ser ¡estudiantes de intercambio en Estados Unidos!
¿Listos para intercambiar casa?
Echa un vistazo a estos cinco consejos rápidos para preparar tu primer intercambio de casa:
1. Crea un perfil interesante
Regístrate en IntercambioCasas.com y crea tu oferta de intercambio: añade buenas fotos de tu casa, y escribe un buen título y descripción. Investiga qué ofrece tu ciudad o región a los visitantes de fuera e muéstralo en tu perfil con vídeos, fotos, enlaces a sitios web…
**2. Sé claro sobre lo que buscas y lo que puedes ofrecer
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Tendrás más posibilidades de conseguir un intercambio con una comunicación fluida, buena y honesta. Define de la forma más precisa posible dónde quieres viajar: qué lugar, qué fechas y qué tipo de casa estás buscando. Sé preciso también en explicar lo que ofreces.
3. Busca según tus preferencias
La búsqueda de IntercambioCasas.com tiene buenos filtros de búsqueda: puedes buscar casas que tengan material para bebés, juguetes, intercambio de coches, piscina, acceso para discapacitados y muchas otras cosas que necesitas o quieras tener en tu intercambio de casa. Utiliza los filtros y si salen pocos resultados elimina los filtros menos habituales.
4. Empieza por buscar con mucha antelación
Los billetes de avión serán más baratos, tendrás más opciones de conseguir un intercambio, y será más fácil planificar el viaje cuanto antes empieces.
5. Ponte en la piel de tu partner de intercambio
Piensa en los rasgos culturales tan únicos del país donde vives ahora, y encuentra la forma de transmitírselos a tu partner de intercambio. No les cuentes solo los cuatro lugares que recomiendas visitar, sino que intenta compartir con él las mejores recomendaciones que darías a un amigo que viene a verte a este nuevo país por primera vez. Esto asegurará que tenga una experiencia maravillosa. Las experiencias positivas ayudan en todos los intercambios de casa: ¡tanto los del presente como los del futuro!
